04 de Octubre 2017 Escenario Agroclimático: Octubre-Noviembre, 2017.


EL ESCENARIO CLIMÁTICO ABANDONA “EL NIÑO”, QUE IMPERÓ EN LOS ÚLTIMOS DOS AÑOS, Y ASUME
UN ESTADO NEUTRAL-FRÍO QUE PODRÍA CONVERTIRSE EN UNA POSIBLE “LA NIÑA”.


Ing. Agr. Eduardo M. Sierra

Especialista en Agroclimatología.
Profesor Facultad de Agronomía UBA - Investigador de CONICET - 
Asesor Bolsa de Cereales de Buenos Aires.


ANOMALÍAS DE TEMPERATURA DEL MAR A FINES DE SEPTIEMBRE DE 2017 (Fuente: CMB/NOAA) 

Durante el otoño y el invierno 2016, el Océano Pacífico se enfrió considerablemente.

La mayoría de los centros de pronóstico coinciden en la posibilidad de que este proceso continúe a lo largo de los próximos meses, dando un escenario “Neutral Frío” que, de continuar el proceso, podría convertirse en una “La Niña”, que alcanzaría su pleno desarrollo hacia el otoño de 2018.

No obstante, este proceso será lento y gradual, lo que unido al calentamiento que aún exhibe el Océano Atlántico, hará que el escenario climático observe, sucesivamente:

» Una primavera de tipo “El Niño”.
» Un verano dentro del rango normal.
» Un otoño de tipo “La Niña”.

Adicionalmente, la circulación entre el Ecuador y el Polo Sur continuará muy activada, produciendo una alternancia entre lapsos cálidos y marcados descensos de la temperatura. 

La primavera observará el riesgo de heladas tardías, el verano experimentará fuertes calores, y el otoño se verá expuesto a heladas tempranas.

Dado que esta tendencia es incipiente, será prudente continuar vigilando la evolución del clima hasta tanto pueda arribarse a un diagnóstico certero.





PRECIPITACIONES PREVISTAS DURANTE LA PRIMAVERA 2017:



La mayor parte del área agrícola sudamericana observará precipitaciones superiores a lo normal, con riesgo de tormentas severas, con granizo, vientos.

Las áreas afectadas por anegamientos experimentarán precipitaciones locales superiores al promedio regional, agravando su estado.

La circulación entre el Ecuador y el Polo Sur continuará muy activada.

Por un lado, se producirán largos períodos cálidos, con riesgo de tormentas severas con granizo, vientos y aguaceros torrenciales.

Por otro lado, tendrán lugar cortos pero muy intensos descensos térmicos, con riesgo de heladas primaverales en gran parte de La Argentina y el Uruguay, aunque sin llegar a Bolivia y el Paraguay.




PRECIPITACIONES PREVISTAS DURANTE EL VERANO 2018:



Durante el verano, las precipitaciones asumirán valores cercanos a lo normal en la mayor parte del área agrícola sudamericana.

Las áreas afectadas por anegamientos experimentarán precipitaciones locales superiores al promedio regional pero la intensa evaporación provocada por los fuertes calores estivales comenzarán a reducir el nivel del agua.

La circulación entre el Ecuador y el Polo Sur continuará muy activada, alternándose largos períodos cálidos con cortos pero marcados descensos térmicos, que darán oportunas pausas en la ola de calor.


 

CONCLUSIONES:

El sistema climático muestra signos de estar evoluciondo hacia un estado de “La Niña”, pero aún no es posible evaluar si este proceso se completará en su totalidad, o si quedará en un estado intermedio, tipo un “Neutral Frío”.

No obstante, debe tenerse en cuenta que el último episodio de “La Niña” tuvo lugar en la temporada 2011/2012, por lo que el fenómeno se encuentra sobre su período de retorno promedio, que es de siete años, lo cual incrementa significativamente su probabilidad de que su desarrollo alcance plenitud.

El desarrollo de un episodio intenso de “La Niña”, que cause una significativa reducción de las precipitaciones durante el verano y el otoño de 2018, favorecería considerablemente la reducción de los anegamientos que afectan a vastas extensiones, pero, al mismo tiempo, podría limitar el desarrollo de los cultivos en las zonas subhúmedas del sudoeste del área agrícola argentina, y determinaría que el inicio de la campaña 2018/2019 tuviera lugar con reservas hídricas escasas.

Por lo tanto, habrá que continuar una rigurosa vigilancia climática a fin de anticipar los posibles riesgos que irán emergiendo a lo largo de la temporada a fin de tomar las medidas que correspondan.