29 de Abril 2019 Manejo y control químico mitigan el escape de las malezas difíciles en cultivos de soja.



Fuente: Revista Productiva.

El control de malezas es cada vez más complicado en las áreas de los productores, por ello es fundamental desarrollar un manejo eficiente sumado al uso de fitosanitarios eficaces para obtener menos incidencia de las hierbas indeseadas en los cultivos.

Para tratar de acercar estos conceptos, la empresa Rainbow Agro Sciences Paraguay S.A. realizó una charla de capacitación para los productores de la Cooperativa La Paz, en el departamento de Itapúa.

El Ing. Agr. José María Cichero, gerente de Investigación & Desarrollo de Rainbow, comentó que primeramente se habló acerca los trabajos que realiza la compañía en el área de la producción, para luego trasmitir los conocimientos en torno a los problemas mundiales de malezas y, en particular, de Sudamérica. Luego, más a nivel local, la idea fue exponer cuáles son los problemas de malezas que hoy en día se tienen en Paraguay y, de alguna manera, darles a los productores algunas recomendaciones de cómo empezar a manejar esas hierbas indeseadas en el cultivo de soja específicamente.

“Acá los productores nos han manifestado que las dos principales malezas son la buva (Conyza sp.) y la lecherita (Euphorbia heterophylla). Tenemos experiencias en control de ellas, pero lo que nosotros quisimos recalcarles en esta charla es que con el herbicida solo no se sale del problema, al menos no en el largo plazo, ya que no es una solución sustentable en el tiempo. Es cierto, es una muy buena solución, tenemos grandes herramientas, pero debemos combinarlas con manejo y eso es lo que los productores saben hacer y nosotros que somos agrónomos tenemos que trabajar codo a codo con ellos para que los herbicidas sigan funcionando”, explicó.

Ese manejo se refiere, básicamente, a la combinación de principios activos, de modos de acción, en el uso de preemergentes. Agregó que a veces recién se procede a la utilización de productos cuando se ven las malezas, pero es necesario comenzar el control antes de visualizarlas, de tal forma a combinar estrategias que contrarresten su desarrollo, considerando que es un enemigo que rápidamente puede acostumbrarse y crear resistencia al control químico practicado.

“Entonces, lo que les mostramos es la variedad de estrategias que pueden usar para combatir esa misma maleza, ya sea en la desecación, en la preemergencia o en la posemergencia del cultivo”, indicó. Cichero comentó que disponen de una amplia gama de herbicidas y el objetivo de la compañía es seguir ampliando el portafolio de productos. “Hoy en día estamos trabajando en ensayos locales en Paraguay para poder realizar combinación de productos, tener los coformulados en el futuro cercano y poder lanzarlos como una herramienta hecha a la medida del productor paraguayo”, expresó.

Amaranthus


El profesional indicó que el Amaranthus es una maleza que sigue creciendo en participación en Argentina y Uruguay, principalmente, pero desafortunadamente ya fueron encontrados algunos individuos en suelos de Paraguay.

“Por desgracia, tenemos una muy mala experiencia con esta maleza que es una de las más problemáticas que enfrenta el productor en Argentina y en Uruguay también hace un par de años empezó a ser un problema muy grave. En Argentina dos tipos de Amaranthus hoy ocupan unas 13 millones de hectáreas, ya sea el resistente al glifosato o el resistente al grupo de las ALS y también al glifosato. Por eso, si la maleza ya está instalada en Paraguay, es muy importante que los productores entiendan que hay que empezar a combatirla, no solo con el glifosato porque en algún momento vamos a generar resistencia y no es una cuestión de suerte, sino de probabilidad, de estadísticas”, aseguró.

Presencia


A su vez, el Ing. Agr. Diego Ozuna, responsable comercial de Rainbow en la zona sur, comentó que la empresa dispone de un paquete tecnológico importante en cuanto a productos, destacándose principalmente la gama de herbicidas, que representa prácticamente el 40 % de toda la cartera.

“Somos fuertes en herbicidas, tenemos todas las opciones que se pudieran necesitar en el campo. Por eso, en cuanto a buva hay mucha experiencia ya, es una maleza que hace rato está instalada en nuestra región. En Rainbow tenemos la alternativa de control para ella que es nuestro 2,4-D, prácticamente único en el mercado en cuanto a su elevada concentración de 96,6 %, casi sin olor, que es una ventaja para aplicar donde hay vecindario, por ejemplo”, destacó.

El manejo recomendado es la mezcla del glifosato, un secuencial con Paraquat y un herbicida residual, que en este caso podría ser el Procore a base de Diclosulam, o el Sunzone a base de Sulfentrazone 75 %, también único en el mercado en cuanto a concentración. En particular, hoy en la región de La Paz se habla mucho de la dificultad de controlar la lecherita, por lo tanto, Rainbow recomienda algunas propuestas para el mejor control de este mal.

Se trata del Sunzone, que es el herbicida residual que mejores resultados está teniendo para combatir esa maleza. Y para posemergente sobre soja Rainbow ofrece el Fomesafen, que también es una muy buena alternativa para el control de esta hierba indeseada. “Tenemos muchas alternativas en cuanto a herbicidas, pero hay que hacer ensayos, ya que solo así se disipan las dudas que existen. Y hoy en día estamos haciendo los ensayos, estamos viendo el problema, atendiendo a cada productor y haciendo las mezclas en cada caso para demostrar a campo los resultados”, concluyó.

Experiencia


El Ing. Agr. Shiro Kakigi, responsable de asistencia técnica en la Cooperativa La Paz, comentó que el trabajo con Rainbow comenzó hace dos o tres años. Si bien la compañía es bastante nueva en la región, la cooperativa está probando algunos de sus productos en ensayos, pero todavía no se están usando grandes volúmenes.

“Estamos en proceso de ensayo aún, pero está resultando bastante bien. Igual que otras regiones, también tenemos muchos problemas de malezas resistentes a productos tradicionales, como mbu'y, kapi'i pororo, ype rupa, Santa Lucía y lecherita, que cada vez empeora la situación y genera altos costos para el control”, explicó.

Desde su punto de vista, los socios de la institución están manejando bastante bien las malezas, pero cada vez se dificulta más, por ende aumenta más el costo del herbicida también.

“Yo trabajo hace siete años aquí en la empresa cooperativa y en esa época creo que oscilaba entre USD 15 a USD 20 el costo de control de malezas y actualmente estamos gastando más de USD 70 por hectárea, es decir, se triplicó. Pero la incorporación de más empresas nos ayuda a tener una mayor diversidad en cuanto a herramientas para el control”, resaltó.